Finjamos, pues.

Sus facciones cambiaron drásticamente cuando notó que ella se sentaba frente a él, en la misma mesa para comer. Tal fue su expresión, que quien servía la comida, preocupado, le dijo: "Amigo, ¿qué te pasa, por qué de pronto tan serio?" "Yo siempre estoy así de serio", respondió con un tono fingido.

Comentarios

Publicar un comentario